Resumen:
Las familias con hijos con discapacidad tienen varios factores de riesgo que las pueden poner en una situación de estrés. Esto es algo que ellas mismas manifiestan y que algunos estudios corroboran. Esta circunstancia se debe de tener en cuenta en el diseño de apoyos y estrategias de intervención dirigidas a este colectivo, de manera que no nos podemos olvidar de ofrecerles herramientas que sean útiles para gestionar este estrés y de esta forma, incrementar tanto su percepción de que son capaces de manejar tanto a la situación como la difícil tarea de educar a sus hijos con necesidades especiales (empoderamiento). Por otro lado, Mindfulness está emergiendo como una estrategia muy útil para la gestión del estrés en diferentes ámbitos y desde hace solo unos pocos años, se está implementando en Estados Unidos en familias con hijos con TEA y TDAH (también en personas con discapacidad) y están empezando a aparecer algunas investigaciones que aportan datos muy interesantes acerca de los beneficios de este programa.