Abstract:
Este artículo pretende reflexionar acerca de cómo la restricción que se confiere al término de autonomía en la Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia (entendida como autonomía para la realización de las actividades básicas de la vida diaria) ha reducido significativamente su alcance y su aplicación práctica a través del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD). Para ello, se analiza el citado texto normativo y el desarrollo de los servicios del SAAD hasta la actualidad, y se cuestiona en qué medida se desarrollan actuaciones o servicios que permitirían a las personas con discapacidad la realización de actividades instrumentales y avanzadas de la vida diaria, que definen la autonomía en un sentido más amplio.