Laburpena:
La puesta en marcha de los grupos de autogestores pone en evidencia que, en la mayoría de los casos, las personas con discapacidad intelectual no están preparadas para hablar o decidir por si mismas,
o para participar en la asociación o en su entorno mas próximo. Necesitan personas que les apoyen en su proceso de aprendizaje de la autogestión, personas que les orienten para que puedan expresarse de una forma adecuada, personas que les escuchen y respeten. Estas son las personas de apoyo de los grupos de autogestores, profesionales de las asociaciones que también necesitan apoyo y orientación para mejorar en el desarrollo de su tarea.