Laburpena:
A partir de ciertas dosis, la radiación puede provocar malformaciones y enfermedades, y es en este punto cuando surgen las dificultades para
establecer un rango específico de exposición para evitar que se produzcan. Se acepta universalmente que es precisa una dosis mínima superior a los 100 milisivers para producir lesiones por radiación, cuando el fondo que nos rodea aporta entre 2,5 y 3 milisivers al año, de los cuales un 0,4% está originado
por una serie de materiales radioactivos en la atmósfera que hemos ido precipitando.