Resumen:
En una sociedad donde la autonomía individual y la igualdad entre personas constituyen normas morales y políticas dominantes y se produce un debate público en torno a esta cuestión, es preciso analizar las representaciones sociales de la dependencia, lo que supone: 1) pensar la dependencia, para determinar si existe un modelo específico; 2) estudiar la asociación entre dependencia e incapacidad; 3) detenerse sobre la percepción de la dependencia como síntoma del ‘fracaso’, insistiendo en los efectos ambivalentes de las políticas sociales; 4) subrayar la tendencia a la feminización y etnización de la dependencia; y 5) analizar la propensión a asociar precariedad laboral y dependencia. Este artículo intenta dar cuenta del carácter múltiple y cambiante de la dependencia, que no se reduce ni a las personas discapacitadas, ni las mayores, ni al periodo actual.