Resumo:
El envejecimiento activo es considerado como un concepto multidimensional que abarca y supera la buena salud, resultado de un amplio conjunto de factores biológicos, psicológicos y sociales. En el caso de las personas mayores con discapacidad, la ausencia de una política de promoción y sensibilización en la comunidad a veces les niega la igualdad de oportunidades en relación con el resto de los ciudadanos. Para desarrollar ese potencial de envejecimiento activo en personas con discapacidad hacen falta políticas y medidas concretas como las que propone el CERMI en este documento en el que un grupo de representantes de diferentes organizaciones de la discapacidad ha elaborado una serie de propuestas que juzgan necesarias para propiciar procesos de envejecimiento activo. Agrupadas en doce apartados y teniendo en cuenta las características de cada grupo de discapacidad, las propuestas se dirigen a la promoción de la autonomía personal, abordan aspectos económicos, sanitarios (divulgar material informativo sobre envejecimiento activo y salud) y legislativos (garantizar el cumplimiento de la Convención de la ONU). La vivienda y la atención en el medio rural (promover el acceso a recursos tecnológicos) son objeto de atención, a la vez que se plantean iniciativas relacionadas con la familia y la colaboración intergeneracional, que favorecen actividades de participación conjunta entre personas de distintas edades en el ámbito social y cultural.
