Resumo:
Los trastornos autonómicos en enfermedad de Parkinson son un problema precoz, frecuente y que altera significativamente la calidad de vida de los pacientes, por lo que deben ser sospechados y manejados con el mismo ahínco que los síntomas motores. A la fecha resta mucho por precisar en cuanto a los mecanismos implicados, la correlación clínica y el tratamiento adecuado de estas alteraciones. También está por definir su importancia como factores de riesgo, síntomas premotores e incluso su rol en la etiopatogenia de la enfermedad de Parkinson.