La literatura incluyó las anomalías del procesamiento sensorial (dolor asociado) en los criterios de diagnóstico para las personas con autismo (TEA). Sin embargo no disponemos de ningún método estándar para la evaluación de las anomalías sensoriales y la conducta de dolor en personas con TEA. Cuarenta y seis adultos con TEA fueron incluidos en este estudio. Se evaluó la sensibilidad al dolor procedimental y agudo de forma objetiva en diversos contextos. Luego analizamos la matriz de correlación y ejecutamos un análisis dimensional. La correlación entre la sensibilidad al dolor y las variables clínicas fue significativa. La comorbilidad fue el principal factor de mediación entre la severidad del autismo y la intensidad del dolor. Nuestros resultados sugieren que nuestra metodología puede ser utilizada para evaluar la sensibilidad al dolor en adultos con TEA y nosotros confirmamos la hipótesis de que la comorbilidad es el principal factor de mediación entre la severidad del autismo y la intensidad del dolor.